Cómo atender el parto de un cachorro

Yorkshire, Bichón Maltés, Chihuahua y Pomerania en Criadero Cantillana. Ver cachorros aquí: www.criaderocantillana.com/tablon.El parto de un cachorro es un momento especial tanto para el animal como para su familia humana. Pero también supone nerviosismo, sobre todo, entre los dueños del animal al que asisten en el parto. La mayoría de los partos de las perras se suceden sin problema alguno, por lo que no requieren de ningún veterinario. Incluso, las hembras más experimentadas suelen tener partos muy rápidos y tranquilos. Por ello, si un adulto responsable y tranquilo permanece con la perra durante todo el proceso, sin gritos ni ansiedades, suele ser suficiente. De todas formas, una vez que ha finalizado el parto es muy buena idea que el veterinario palpe a la perra para constatar que todo ha resultado según lo previsto.

Por lo tanto, para que estéis preparados ante un hipotético parto de vuestra mascota, os indicamos una serie de aspectos a tener en cuenta para identificar situaciones que suponen un riesgo para la vida de la madre y de los cachorros, indicios que nos avisan de que el parto se complica.

 

INDICIOS DE ALARMA ANTE UN PARTO CANINO

Algunas de los signos que nos deben alertar cuando la perra está embarazada o de parto son:

  • Si la perra lleva más de 65 días de gestación.
  • Si tarda más de 24 horas en comenzar a parir, cuando ya ha comenzado el proceso de nacimiento de los cachorros.
  • Si lleva más de 60 minutos con contracciones y no nace ningún cachorro.
  • Si entre el nacimiento de un perro y otro transcurren más de cuatro horas y quedan más cachorros por nacer.
  • Si durante el parto, la perra no presenta síntomas de dolor y se muestra apática.
  • Si unos días o semanas después del parto, hay síntomas de enfermedad como: fiebre, inapetencia, decaimiento, las mamas están inflamadas, convulsiones o rechazo hacia los cachorros. Estos síntomas pueden indicar que la perra padece una inflamación de las glándulas mamarias, le falta calcio o tiene infección en el útero.

 

DURACIÓN Y DIFICULTADES DEL PARTO

La duración del parto oscila entre dos y doce horas. Varía de unas perras a otras dependiendo de la raza, o si la hembra es primeriza. Normalmente, el nacimiento del primer cachorro es más largo que el del resto. Hay que tener en cuenta que la perra, además de a los cachorros, también tiene que expulsar cada placenta correspondiente. Algo a tener en cuenta en este sentido es que la última placenta se expulsará, como máximo, doce horas después del último nacimiento. Tampoco hay que asustarse por el color verdoso del líquido vaginal que expulsa la perra durante el parto, porque se trata de algo normal.

Se considera normal que el intervalo de nacimiento entre un cachorro y otro sea de una hora, pero puede haber momentos de descanso prolongados entre la llegada de una cría y otra. Estos intervalos pueden durar varias horas, lo cual es normal, siempre que no se produzcan contracciones. Si la perra tiene dificultades para extraer a los cachorros, se le puede ayudar tirando de ellos con cuidado. En el caso de que la perra haya comenzado claramente con las contracciones, lleva más de una hora y no ha nacido ningún cachorro, es el momento que sea vista por el veterinario. Una vez que ha comenzado a parir puede haber períodos de descanso, pero no de una duración de más de cuatro horas.

Las principales causas que pueden provocar dificultades del parto son las «distocias» y la «inercia uterina». El primer caso consiste en la imposibilidad de expulsar uno o más cachorros por diferentes causas, como el tamaño excesivo de los cachorros con respecto a la madre o la incorrecta colocación de las crías. Mientras que la inercia uterina sería el cese de las contracciones. También hay que tener cuidado si la perra se muestra abatida y no muestra dolor durante el parto. Es lógico que debe descansar pero no estar demasiado apática. Y por último, una vez que ha parido hay que vigilar que no tenga fiebre, pérdida del apetito y rechazo por la camada completa.

 

ESTERILIZACIÓN DE LA PERRA

Lo más responsable es esterilizar los perros salvo que tengamos certeza de encontrar hogar a todos los cachorros, hay muchos perros sin hogar. Así como en el caso de que la perra no vaya a tener descendencia, lo más recomendable es esterilizarla, porque además conlleva beneficios para su salud en el futuro:

  • Evitar las molestias derivadas de la menstruación, como la incómoda persecución de los perros.
  • Prevenir los embarazos psicológicos, que producen cambios de carácter.
  • Reducir el riesgo de infecciones uterinas, tumores de mama y quistes ováricos.
  • Evitar las complicaciones postparto.
  • No hay riesgo de embarazos no deseados, con las consecuentes camadas indeseadas que, en muchas ocasiones, no se pueden atender.

En este sentido, según la Fundación Affinity, hay que tener claro que el 14% de los animales de los albergues son cachorros procedentes de camadas indeseadas. El abandono de animales es un grave problema en nuestro país. España es uno de los países europeos donde se abandonan más animales al año. El año 2010, según datos de la Fundación Affinity fueron abandonados en España 150.000 perros y gatos.

Fuente: Blog Mascotas y Eroski Consumer.